Un Mundo No Tan Oscuro 1.1

Acto 1: Los Actores

Capitulo 1: Introducción

Robert Sitwell juntaba los compuestos con una presición inigualable. Con razón era al que todos acudían cuando tenían dolores intensos. Y es que su profesión le había valido un fuerte nombre en la comunidad científica de New Button.
-¿Estás bien, cariño? - dijo Freya con ternura.
-Si, pasame el ultimo compuesto - dijo Robert directamente sin un ápice de personalidad.
Esa no fue una respuesta agradable. Ella solo queria saber si su esposo estaba bien porque hace 6 meses que no hacían el amor (y cuando lo hacen es mas que olvidable), pero bueno. Robert depositó la sustancia recien creada en el frasco y se lo paso a Freya.
-Ponlo en el R-Freeze a menos de 40º.
-Ya lo se - dijo ella con una sonrisa, esperando algún tipo de reacción en el rostro de su marido que nunca se dignó en aparecer. Y no es que el hombre hubiese tenido un mal día. ¡Asi era naturalmente!
Freya preparó el dispositivo para que congelara la formula y estuviese lista para su consumo. Su hijo había acabado la ultima dosis esa misma tarde. A Robert no le gustaba que se transformase tan seguido. No porque temiera que el joven que crió pudiera perderse en el frenesí de lobo por pasar tanto tiempo en esa forma, sino porque le generaba mas trabajo. ¡Cómo si no tuviera suficiente ya administrando dosis a todo el vecindario! Pero en fín, así son los adolescentes. ¡Viven su vida a la manera que les sale del intestino grueso y si les das una colleja te acusan de maltrato! (Ok, me desvío). En el transcurso de esta crítica social, Freya intentó seducir a su marido 3 veces y las 3 veces fue enviada al carajo. 2 porque Robert no tiene sangre en las venas (y no por el hecho de que sea amigo de un vampiro) y la última por el aviso del pequeño refrigerador que indicaba que las 8 dosis estaban listas. Obviamente, Roke solo necesitaba una, pero su padre pensó que era mejor tener algunas ya listas. Freya se adelantó al pedido de su amado y las sacó de su frío letargo. Luego procedió a retirar una cuidadosamente y a llevarla escaleras arriba.
-Freya... - dijo Robert, frotandose los ojos por el cansancio.
-¿¿Si, amor?? - dijo Freya volteando de inmediato hacia su hombre, esperando una propuesta picantona de las que él solia hacer en los primeros años de su larga relación.
-Dile a Roke que controle a sus amigos para que dejen de comerse al rebaño. Los corderos no son baratos hoy en dia.
Ah, pobre Freya. Imaginense su cara cuando sus esperanzas se esfumaron, asi como su sonrisa y su fuego interno. Bueno, parte de él. Uno no deja de estar totalmente excitado sin concretar, no importa si tienes colmillos, cola o nariz puntiaguda (Ok, eso fue discriminatorio, lo siento).
Sigamos. Freya asintió con un suspiro y salió del laboratorio del sotano, dirigiendose a la puerta donde al otro lado lo esperaba su retoño, como ella lo llamaba. Pero él no estaba en el lugar donde lo recibió, sino que solo vio a sus amigos en el auto estacionados en la acera. Freya sabía lo que iba a pasar así que no se inmutó cuando un licantropo con chaqueta negra de franjas amarillas y con jeans desgarrados y cortados a modo de bermudas (¿Que con eso, eh?) saltó frente a ella emitiendo un fuerte rugido. A la mujer solo le molesto lo alto del ruido.
-Buen intento, cariño.
La bestia bajo la cabeza en señal de verguenza y decepción por si mismo.
-No eres divertida, mama -. dijo con un tono murmurante.
-Te escuche -. dijo Freya con los parpados entrecerrados.
Roke no era muy original que digamos, no nos engañemos. Es decir, ¿un screamer/jumpscare? Esos dejaron de asustar a la sociedad hace mas de 20 años. Pero al joven no parecía haberle llegado el aviso.
-Aqui tienes, hijo -. dijo la mujer extendiendole el frasco con la sustancia a su chico de 17 años.
-Gracias, mama. Ya me puedo ir. Saluda a papa por mi -. dijo el joven dirigiendose con su peña (¿Peña? Borra eso, por favor).
-Espera, Roke -. dijo su madre. -Diles a tus amigos que ya no se coman a los animales del establo. Tu padre los necesita para su trabajo.
-No puedo hacer eso, mama -. respondió con una medio sonrisa. Freya lo miró confundida. -Yo soy el que se come a los corderos-. dijo soltando una risa.
Freya rodó los ojos.
-¡Con razon nunca tienes hambre en la noche!
Ambos rieron y luego se despidieron. Roke subió al vehiculo descapotable junto a sus colegas (que tambien estaban transformados) y se marcharon a divertirse en la ciudad. Freya se dijo a si misma
-Ay, los pequeños -. y volvió adentro a resguardarse de la noche.
-
La dichosa noche al fin habia llegado, por lo que Keird se estaba tomando un baño para quitarse el bloqueador solar que desprendía ese olor tan nauseabundo. Claro, un humano común no sentiría esa peste ni a medio metro, pero para alguien con hipersentidos como Keird era insoportable. A medida que te resignas a que tu vida es una mierda pinchada en un palo te terminas acostumbrando. Pero la vida del joven (menos joven de lo que parecia) no era de esas. Hoy mismo lo habian invitado a la fiesta de la que todos hablaban. Renata iba a estar allí, por lo que no podìa faltar ya que deseaba mostrarle los avances que había hecho en la metamorfosis. En cualquier otra ocasión, el habría declinado la oferta. Saldría al centro a buscar su propia diversión (como la vez que succionó el veneno de la pierna de un licano y este la habia dado $50 pero le descontó 20 por pasarse con la sangre, aunque el gusto no se lo quitó nadie), pero Renata era Renata. Y un día sin hablar con ella o cuanto menos verla no entraba en la categoría de bueno. 
Volviendo al baño... ah, no. Ahora se esta cambiando LOL. La tipica vestimenta de los de su clase: camisa roja con logo de Cronovirus, pantalones caqui (o quico, como todos los subnormales le empezaron a decir hace año y medio) con bolsillos gordos y una chaqueta, aunque los vampiros no sentían frio, pero se concentraban mucho en la apariencia y la primera impresión. Costumbre de los tiempos del Conde, supongo. Bajo el mismo criterio, el chico de 22 años se limò los dientes (no solo los colmillos), se puso gotas oculares Anti-Fren (que a los ojos del usuario volvían el color rojo en azul, por si ocurría una situación y se evitasen accidentes) y se apagó un cigarrillo en la mano para recordar que estaba vivo, ya que para su gente una simple quemadura era solo un picor.
Todo esto lo hizo en el baño (para que no haya confusiones, lo digo) y a continuación, bajó a la sala principal donde estaban sus padres colgando del techo.
-Mama, papa -dijo Keird alzando ligeramente la voz- me voy ahora.
Los señores Waltman (ambos) estaban en la oscuridad de la sala. Su hijo podía verlos por su vista aumentada, pero cuando se volteó hacia la puerta al ver que no le contestaban, su madre se materializó frente a él.
-¿A que hora volverás? -dijo Lynn con tono cariñoso.
-No lo se, supongo que pasada la madrugada -dijo Keird sin sorprenderse por las habilidades de su madre. quien controlaba los dotes de vampiro muy pronto para su tiempo de conversión. Mientras que ella fue convertida a los 23 años y ahora con sus 46 (pero sin perder su aspecto juvenil) manejaba con relativa facilidad los poderes de la noche, él, con sus 22 tacos pero caruza de puberto, apenas había aprendido a convertirse en murciélago el mes pasado, luego de una serie de dolorosos fallos.
Volvamos con la conversación antes de que nos perdamos algo importante:
-¿Llevas el bloqueador?
-Mama... -dijo el chico con desgano.
-Se que no te gusta el olor, cariño. Es mas, no creo que a nadie le guste, pero responde esto: ¿Prefieres quemarte la cara y quedarte con una cicatriz del tamaño de un testiculo de licano que un poquito de olor a culo de babuino? -dijo Lynn con un tono burlón.
Se nota que la señora conserva el espíritu adolescente con el que conoció a su marido, ¿eh?
Keird sacó el pote de bloqueador del bolsillo.
-Aqui esta -dijo sin levantar el ánimo.
-Muy bien, te puedes ir -dijo su madre con una sonrisa abriendole la puerta a su pequeño (por la cara, porque de mente pequeña no era).
Cuando éste salió al abrigo de la noche, su madre soltó:
-¡Recuerda, al primer rayo te lo aplicas!
Keird se volteó y le respondió:
-Ya no tengo 12 años -dijo rodeando los ojos.
Su madre sonrió.
-No se nota -añadió su esposo desde la casa.
-
La pocima estaba lista para ser consumida, o aplicada, o como prefieras decirle.
Como de costumbre, desprendía un hedor tal que hubiese hecho que todas las ratas a menos de 10 metros se suicidasen para escapar de su ingestión. Pero debido al conjuro que le enseñó su prima, Dorothy no tendría que preocuparse más por el olfato del malo, de ese por el que Patricio se arrepintió de tener naríz. El reloj marcaba las 11:30. Cualquier otro hubiese tenido que apurarse para llegar a tiempo a la fiesta, pero las brujas podían aparecer en cualquier lugar que ellas deseasen con un chasquido de dedos, siempre y cuando fuesen experimentadas. ¿Todo bien, no? Pues no, porque Dorothy no es de esas. Si, provenía de un linaje de expertos en magia y brujería peeeero habia iniciado el curso hace 3 años, cuando los conjuros más geniales como el teletransporte o el polimorfismo se aprendían al 5to. Por lo tanto, la joven bruja había optado por la poción de velocidad que aprendió a elaborar en el último año, poción que, como su nombre lo indica, dota a quien la consuma de alta velocidad de movimiento temporal. Que Dorothy viviera 2 horas en transporte de distancia del lugar de reunión requería la elaboración de este compuesto, principalmente porque el día se le había ido mientras discutía con sus amigos y amigas de la nueva película de Tarantino Jr, y si las frases presentadas en esta superaban a las de Pulp Fiction.
Volviendo al tema de la vivienda, la joven no podía quejarse. Vivía en lo alto d eun complejo de apartamentos a 5 calles del centro mientras que otros como ella sobrevivían en un cuchitril tipico de las ancianas, aunque decoraban sus interiores con todo tipo de adornos. A los adeptos a la magia les gustan las apariencias, rasgo que compartían con los vampiros. Por suerte, Dorothy no necesitaba recurrir a estas practicas (salvo que hubiese visitas importantes como Markis o Rishko), no siquiera para su look personal. Era una chica de 18 años que cumpliría uno más dentro de poco. Esta edad se ajusta, ya que por lo general el curso de magia se inicia a los 16 o a los 15, si eres sobresaliente en los preliminares.
Volviendo a su aspecto, no era nada desagradable. Su cabello color marrón le llegaba a los hombros y sabía un truco o dos para cuidarse estéticamente sin necesidad de magia. Trucos que su madre le había enseñado de muy joven. Aunque el buen aspecto dejó de ser importante para la sociedad dese hace tiempo, a las mujeres les gustaba gozar de ese plus. Y nuestra Dorothy no era la excepción.
Suficiente descripción, volvamos a... ey, ¿dónde está? No me digas que ya salió. Perate que vea hacia la calle... ¡Ah, pos si! Allá va, y muy rápido. Diría que la pocima es de nivel 2 ya que su velocidad se equipara a la de una motocicleta ligera. Aún así, tardará de 20 minutos a media hora en llegar a la fiesta. ¡Y eso si se salta los semáforos! Pero en fin, de cualquier modo la veremos allí de seguro. Espero que no se de cuenta de que no llamó a sus padres para avisarles que salió de casa. Supongo que cuando estas emanciapada esas cosas te dan un poco igual.
-
Ok, para este debo ponerte en situación, asi que acomodate como en las clases de historia:
Luego de que la Guerra Oscura (que duró decadas y acumuló mas muertos que la guerra mundial del 1939) terminara, la población humana claramente descendió. No son el porcentaje más bajo de los que habitan el planeta, pero no llegan a los miles de millones de antes. Diría que ahora sus numeros rondan las docenas de millones en total.
Muy bien, pues de esas docenas de millones, el humano del que te contare es el mas patético, imbécil, desdeñable... innecesario, que habita la tierra. Su nombre es Austin y su vida es lo que podríamos decir una plasta de mierda artificial, el doble de fea y apestosa que la natural. Sus padres no lo quieren, es el menor de 5 hermanos (3 licanos, un brujo y una vampira) que reniegan su existencia, no tiene amigos, nadie lo soporta, se la pasa en el cyber jugando RTS (porque si algo se salva de este ser es que es muy inteligente para su edad de 17 años) y de alguna forma siempre tiene dinero en los bolsillos. Tal vez sea por su complicidad en el tráfico de hojas de ciénaga, mortalmente adictiva para los adeptos a la magia.
En fín, es despreciable simplemente. De esos que no pintan nada en la sociedad. Y de verdad no se, en serio, ¡NO ME ENTRA EN LA CABEZA, como llego a meterse en la fiesta! Ta bien que sea escualido y pueda meterse en varios recovecos, ¿pero en la celebración mas famosa entre los jóvenes, donde el disfrute y la diversión estan a la orden del día? En lugares como esos la seguridad es más grande y que en una instalación del gobierno en el 5to año de la guerra. Y va este energumeno y se cuela. ¿Cómo? Lo averiguaremos en breve, pero antes añadiré algo de la personalidad del muchacho: es muy curioso. En cuanto ve algo que no conoce o no entiende se lanza a por ello. Y eso solo ha traído consecuencias a la desafortunada gente del entorno.
Yo pienso que nada bueno puede salir de su presencia en la fiesta. Seguramente envenenara los tragos con laxantes (que afectan el triple a los lobos) o soltara una urraca malagueña en el lugar, de esas que vuelven locos a los vampiros. En fín, recemos por que todo salga bien, porque la mala espina no creo que me la quite pronto.

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