Un Mundo No Tan Oscuro 1.4
Capitulo 4: El Resto
Dorothy, junto a los amigos con los que charló en la tarde, venìan a la fiesta cada año. La música les fascinaba. Uno de ellos, Dervin, era un aprendíz de DJ, y entendía a la perfecciín el aparato creador de sonido (que ni yo entiendo la verdad). Todos tenían la certeza de que tocaría el proximo año en el club, ya que sus creaciones les habían parecido fascinantes, al nivel de Carbin o Virtual Riot.
El grupo de Dorothy estaba formado por sus amigos de toda la vida. Dervin (el susodicho DJ), Markis (mejor amiga de Dorothy y quien le presento a los demas), Elisa (la guarra del grupo, esa que se ha follado a media escuela de magia pero que cambia totalmente cuando está con sus amigas) y Rishko (el mas experimentado de ambos y el senpai de Dorothy) eran las personas con las que más se juntaba. Su grupo social estructurado, con gustos compartidos y cariño mutuo.
Respecto al temita amoroso, Dorothy se enamoro de Rishko en cuanto lo conoció. Compartían su pasión por la magia y sus deseos de qué hacer despues de graduarse como brujos oficiales eran similares. Dorothy planeaba viajar por el mundo para ayudar a la gente (especialmente humanos) menos afortunada. Ese corazón altruista cautivó a Rishko, quien se le declaró el año pasado, comenzando su relación. Al ser su primer novio, Dorothy era un poco posesiva, sin llegar al extremo claro (salvo una vez que lo paralizó de la cintura para abajo). Por suerte, Rishko era fiel en su relación, y aunque ya estaba en su último año, le prometió a la joven que esperaría a que ella terminase para irse juntos a recorrer el mundo.
Pero luego de recuperar su aliento tras la correteada y encontrarse con sus coleguis, Dorothy y los demas aspirantes a brujos entraron y se pusieron en sus lugares tras conseguir las bebidas favoritas de cada uno. Markis y Rishko no resaltaban con la vestimenta (no solían hacerlo), pero Elisa sabia a lo que iba. Asi que, obligo al descubierto, pollerita roja hasta los muslos y labios rojos como sangre fresca, Elisa atraía todas las miradas de los solteros/as. "Mission accomplished", pensaba ella.
Aunque no era de beber en solitario, Dorothy disfrutaba el alcohol cuándo estaba con su gente. Elisa era la experta en tragos, por lo que guiaba al resto en lo que al chupi se refiere. En estos momentos, les esta mostrando como juntar bebidas de la forma correcta.
-Paso 1, mis queridos padawans, -dice mientras sostiene dos botellas, una mas alcoholica que la otra, frente a un bol de metal- juntar los dos compuestos. pero no juntarlos asi como asi. No. Deben asegurarse de que son compatibles. Si uno empieza a echar burbujas en cuanto se tocan, lo son. Sinó, os sabra a orina de licano y sera una experiencia traumante.
-Me lo creo. -dijo Rishko mientras sostenía su vaso.
-Todos nos creemos de que sepas a que sabe la orina de licano. -dijo Markis antes de soltar una risotada a la que todos se unieron.
-Ja. Ja. -respondio Elisa sarcásticamente.
Dorothy miró a su alrededor. Aún le sorprendìa que tanta gente viniese a la fiesta. Dado que estaba en la parte de arriba junto al barandal, podía verlos a todos. Unos licanos que parecían estar en una competencia de chupitos, un grupo de murciélagos que sobrevolaba el lugar, un grupo de personas pálidas (posiblemente vampiros) que se dispersaban por el lugar con los puños cerrados... ¡Oh, el bol burbujea! Me pregunto que saldra...
-¡Bualá! -dijo Elisa alzando las manos. -Contemplad, hijos mios, al InstaShupShup.
Dorothy y sus amigos aplaudieron y pusieron los vasos en el bol, llenandolos.
-¿Y bien?
-Bueno, no sabe a orina asi que...
Los jovenes rieron y bebieron.
En un determinado momento, Markis sacó su telefono móvil para grabar el lugar.
-Mas vale que grabe esto para nuestros compañeros en detención.
-Seh. Se molestarían si no lo hicieramos -dijo Dervin.
Markis apuntó la camara del teléfono a la pista de baile. Rishko se sentó al lado de Dorothy.
-¿Te estas divirtiendo? -le preguntó.
-Si. ¿Podremos bajar a bailar?
-Cuando quieras, linda. -dijo Rishko dandole un beso.
Aww, amor joven. Lo llevare siempre en el corazón, al menos hasta que me engañe con mi mejor amiga. Y hablando de mejores amigas, Markis apoyó el codo en el barandal mientras sostenia el móvil, así que cuando un tipo que pasaba tropezó y chocó con el barandal...
-¡Mierda! -grito Markis.
-¡Oh, se cayó! -gritò Elisa con su vaso en la mano.
-¡Ay no! -dijo Markis preocupada.
-No te preocupes. -le dijo Dorothy. -Tiene recubrimiento de platino. Estará bien.
La brujita decía la verdad. El platino había estado salvando moviles desde hace más de 5 años.
-Si, pero si alguien lo agarra... o lo pisa...
Markis empezó a angustiarse. Y cuando eso pasaba, empezaba a lanzar hechizos aleatorios.
-Tranquila, iré por el. -le dijo Dorothy tomandola de los hombros.
-¿Voy contigo? -le preguntó Rishko.
-Nah, en seguida vuelvo. -le respondió su novia.
Dorothy se paró y corrió hacia las escaleras para abajo. Debía encontrar ese móvil antes de que su amiga cometiese una locura accidental.
-
Pero nos llaman desde la otra punta del club, donde vemos a Austin. Este hombrecillo me sigue poniendo nervioso. Por donde entró, por cierto... Mmm... Oh, claro. Esa ventanilla de la esquina superior derecha. Nunca vigilan ese puto lugar y suceden cosas como esta. Si los guardias siguen rascandose los huevos en los puestos, ocurrirá una tragedia tarde o temprano. Bah, supongo que tanto tiempo sin incidentes mayores tienden a malacostumbrar a la gente.
Volvamos a lo nuestro. Austin esta ahí, parado frente a la pista de baile. Planenando su siguiente fechoría, seguramente. La última vez que se metió a la fiesta, causó que unos licanos montasen una muy fea. Pusó sangre de cordero azucarada en sus bebidas, lo cual los volvió un poco locos y derivó en que los tuvieran que echar a patadas del club. Otra vez, causó una pelea entre una vampira y una bruja lo cual terminó en desastrozos resultados que involucraron noches en la carcel, ventanas rotas y litros de vómito.
Aún no me creo lo de que no puedan atraparlo por las cosas que hace. Si de mi dependiese, se comería varias tundas y torturas medievales. Es el típico cabrón que cree que nunca va a responder por sus actos. Ya le caerá. Ya le caerá esa espada de Damocles al rey en potencia. Aunque ha pasado mucho desde la guerra y la sociedad en general parece haber aprendido por fìn que mentir y manipular es mala idea. El mundo está en una relativa paz y las únicas crisis existentes son las intrafamiliares. Claro ejemplo es el de éste humano. Menospreciado desde el principio. Sus padres se la pasan discutiendo y nunca le prestaron mucha atención que digamos. Nunca se llevó bien con sus hermanos, los cuales ya casi tenían la vida hecha cuando él nació. No catalogó en la escuela de magia ni mantiene notas altas en el instituto. No sabe a donde irá cuando se gradue, si es que lo hace. Sus padres ya le han dicho que no le pagarán la universidad. Aunque tampoco es que presente especial interés en ella.
Empezó a buscarse la vida a los 12, donde se juntó con malas influencias y ya que no había nadie que le advirtiese pues cayó al lado oscuro. Fue lo suficientemente inteligente como para alejarse del consumo de drogas. Tampoco ha perdido la inocencia genital. Lo que más le interesa es ganar dinero y conseguir su vivienda propia, la cual llenará con lo que más le apasiona: videojuegos. Desde esos días de su infancia en que se encerraba en el cuarto de su hermano cuando éste no estaba y usaba su consola sin permiso no ha dejado de jugar. Sus nuevas amistades no comparten su pasión, pero aún asi se divierten. Y tienen algún que otro juego que a Austin le encanta.
Pero más alla de todo el dinero, los juegos y su caída en desgracia, lo que más le gusta es una cosa: putear a la gente. Joderla. Hacer daño al projimo. Y por eso lo estamos vigilando. Porque en cualquier momento va a hacer lo suyo. Va realizar un acto diabólico. Y cuando lo haga... Oh, mira. ¡Un teléfono móvil!
El grupo de Dorothy estaba formado por sus amigos de toda la vida. Dervin (el susodicho DJ), Markis (mejor amiga de Dorothy y quien le presento a los demas), Elisa (la guarra del grupo, esa que se ha follado a media escuela de magia pero que cambia totalmente cuando está con sus amigas) y Rishko (el mas experimentado de ambos y el senpai de Dorothy) eran las personas con las que más se juntaba. Su grupo social estructurado, con gustos compartidos y cariño mutuo.
Respecto al temita amoroso, Dorothy se enamoro de Rishko en cuanto lo conoció. Compartían su pasión por la magia y sus deseos de qué hacer despues de graduarse como brujos oficiales eran similares. Dorothy planeaba viajar por el mundo para ayudar a la gente (especialmente humanos) menos afortunada. Ese corazón altruista cautivó a Rishko, quien se le declaró el año pasado, comenzando su relación. Al ser su primer novio, Dorothy era un poco posesiva, sin llegar al extremo claro (salvo una vez que lo paralizó de la cintura para abajo). Por suerte, Rishko era fiel en su relación, y aunque ya estaba en su último año, le prometió a la joven que esperaría a que ella terminase para irse juntos a recorrer el mundo.
Pero luego de recuperar su aliento tras la correteada y encontrarse con sus coleguis, Dorothy y los demas aspirantes a brujos entraron y se pusieron en sus lugares tras conseguir las bebidas favoritas de cada uno. Markis y Rishko no resaltaban con la vestimenta (no solían hacerlo), pero Elisa sabia a lo que iba. Asi que, obligo al descubierto, pollerita roja hasta los muslos y labios rojos como sangre fresca, Elisa atraía todas las miradas de los solteros/as. "Mission accomplished", pensaba ella.
Aunque no era de beber en solitario, Dorothy disfrutaba el alcohol cuándo estaba con su gente. Elisa era la experta en tragos, por lo que guiaba al resto en lo que al chupi se refiere. En estos momentos, les esta mostrando como juntar bebidas de la forma correcta.
-Paso 1, mis queridos padawans, -dice mientras sostiene dos botellas, una mas alcoholica que la otra, frente a un bol de metal- juntar los dos compuestos. pero no juntarlos asi como asi. No. Deben asegurarse de que son compatibles. Si uno empieza a echar burbujas en cuanto se tocan, lo son. Sinó, os sabra a orina de licano y sera una experiencia traumante.
-Me lo creo. -dijo Rishko mientras sostenía su vaso.
-Todos nos creemos de que sepas a que sabe la orina de licano. -dijo Markis antes de soltar una risotada a la que todos se unieron.
-Ja. Ja. -respondio Elisa sarcásticamente.
Dorothy miró a su alrededor. Aún le sorprendìa que tanta gente viniese a la fiesta. Dado que estaba en la parte de arriba junto al barandal, podía verlos a todos. Unos licanos que parecían estar en una competencia de chupitos, un grupo de murciélagos que sobrevolaba el lugar, un grupo de personas pálidas (posiblemente vampiros) que se dispersaban por el lugar con los puños cerrados... ¡Oh, el bol burbujea! Me pregunto que saldra...
-¡Bualá! -dijo Elisa alzando las manos. -Contemplad, hijos mios, al InstaShupShup.
Dorothy y sus amigos aplaudieron y pusieron los vasos en el bol, llenandolos.
-¿Y bien?
-Bueno, no sabe a orina asi que...
Los jovenes rieron y bebieron.
En un determinado momento, Markis sacó su telefono móvil para grabar el lugar.
-Mas vale que grabe esto para nuestros compañeros en detención.
-Seh. Se molestarían si no lo hicieramos -dijo Dervin.
Markis apuntó la camara del teléfono a la pista de baile. Rishko se sentó al lado de Dorothy.
-¿Te estas divirtiendo? -le preguntó.
-Si. ¿Podremos bajar a bailar?
-Cuando quieras, linda. -dijo Rishko dandole un beso.
Aww, amor joven. Lo llevare siempre en el corazón, al menos hasta que me engañe con mi mejor amiga. Y hablando de mejores amigas, Markis apoyó el codo en el barandal mientras sostenia el móvil, así que cuando un tipo que pasaba tropezó y chocó con el barandal...
-¡Mierda! -grito Markis.
-¡Oh, se cayó! -gritò Elisa con su vaso en la mano.
-¡Ay no! -dijo Markis preocupada.
-No te preocupes. -le dijo Dorothy. -Tiene recubrimiento de platino. Estará bien.
La brujita decía la verdad. El platino había estado salvando moviles desde hace más de 5 años.
-Si, pero si alguien lo agarra... o lo pisa...
Markis empezó a angustiarse. Y cuando eso pasaba, empezaba a lanzar hechizos aleatorios.
-Tranquila, iré por el. -le dijo Dorothy tomandola de los hombros.
-¿Voy contigo? -le preguntó Rishko.
-Nah, en seguida vuelvo. -le respondió su novia.
Dorothy se paró y corrió hacia las escaleras para abajo. Debía encontrar ese móvil antes de que su amiga cometiese una locura accidental.
-
Pero nos llaman desde la otra punta del club, donde vemos a Austin. Este hombrecillo me sigue poniendo nervioso. Por donde entró, por cierto... Mmm... Oh, claro. Esa ventanilla de la esquina superior derecha. Nunca vigilan ese puto lugar y suceden cosas como esta. Si los guardias siguen rascandose los huevos en los puestos, ocurrirá una tragedia tarde o temprano. Bah, supongo que tanto tiempo sin incidentes mayores tienden a malacostumbrar a la gente.
Volvamos a lo nuestro. Austin esta ahí, parado frente a la pista de baile. Planenando su siguiente fechoría, seguramente. La última vez que se metió a la fiesta, causó que unos licanos montasen una muy fea. Pusó sangre de cordero azucarada en sus bebidas, lo cual los volvió un poco locos y derivó en que los tuvieran que echar a patadas del club. Otra vez, causó una pelea entre una vampira y una bruja lo cual terminó en desastrozos resultados que involucraron noches en la carcel, ventanas rotas y litros de vómito.
Aún no me creo lo de que no puedan atraparlo por las cosas que hace. Si de mi dependiese, se comería varias tundas y torturas medievales. Es el típico cabrón que cree que nunca va a responder por sus actos. Ya le caerá. Ya le caerá esa espada de Damocles al rey en potencia. Aunque ha pasado mucho desde la guerra y la sociedad en general parece haber aprendido por fìn que mentir y manipular es mala idea. El mundo está en una relativa paz y las únicas crisis existentes son las intrafamiliares. Claro ejemplo es el de éste humano. Menospreciado desde el principio. Sus padres se la pasan discutiendo y nunca le prestaron mucha atención que digamos. Nunca se llevó bien con sus hermanos, los cuales ya casi tenían la vida hecha cuando él nació. No catalogó en la escuela de magia ni mantiene notas altas en el instituto. No sabe a donde irá cuando se gradue, si es que lo hace. Sus padres ya le han dicho que no le pagarán la universidad. Aunque tampoco es que presente especial interés en ella.
Empezó a buscarse la vida a los 12, donde se juntó con malas influencias y ya que no había nadie que le advirtiese pues cayó al lado oscuro. Fue lo suficientemente inteligente como para alejarse del consumo de drogas. Tampoco ha perdido la inocencia genital. Lo que más le interesa es ganar dinero y conseguir su vivienda propia, la cual llenará con lo que más le apasiona: videojuegos. Desde esos días de su infancia en que se encerraba en el cuarto de su hermano cuando éste no estaba y usaba su consola sin permiso no ha dejado de jugar. Sus nuevas amistades no comparten su pasión, pero aún asi se divierten. Y tienen algún que otro juego que a Austin le encanta.
Pero más alla de todo el dinero, los juegos y su caída en desgracia, lo que más le gusta es una cosa: putear a la gente. Joderla. Hacer daño al projimo. Y por eso lo estamos vigilando. Porque en cualquier momento va a hacer lo suyo. Va realizar un acto diabólico. Y cuando lo haga... Oh, mira. ¡Un teléfono móvil!
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